Visita a Obaka-san~

A ver,realmente comenzaba a creer que Ludwig no estaba en sus cabales cuando me pidió semejante favor.

Y comencé a dudar de mi propia cordura cuando acepté semejante favor.

Alemania me pidió ir donde Gilbert y llevarle algunas cosas,y de paso hacerle compañía por la tarde porque él tenia una...cita con Feliciano.

¿Por qué razón en este mundo debía ir a la casa de quien me hace la vida imposible desde hace siglos sólo porque no puede ir su hermano porque tiene una cita? ¿Por qué?

''Aniki está enfermo,no creo que tenga energías para molestarte''

Fruncí el ceño al escuchar esa frase.Estuve a punto de decirle que no soy la enfermera de absolutamente nadie,pero antes de que pudiera abrir la boca y defenderme,Alemania me miraba suplicante , juntaba sus manos y me rogaba, ''Por favor,Roderich'' ,dijo.

Froté mis sienes y suspiré casi derrotado.No podía negarme porque entre Feliciano y Gilbert,volverían loco a Ludwig,así que creo que ayudarle aunque sea un poco no sería malo...supongo.

AL escuchar mi afirmación,Alemania me dio las gracias feliz,pero le dejé en claro que sería la primera y única vez que hacía esto por él.


Y ahí estaba,afuera de la casa del idiota más grande que hubiera pisado la tierra.Aún dudaba si llamar a la puerta.Pensé que podía entrar por una de las ventanas,como típicamente hace él cada vez que va a molestarme a Viena,pero rápidamente deseché esa idea porque simplemente no me rebajaría a su nivel.Y esta sería una buena oportunidad de enseñarle buenos modales.

Partiendo por entrar correctamente a una casa ajena.

Toqué el timbre y me dispuse a esperar.

Estaba recostado en mi cama, tenía la cabeza recargada en la cabecera de la cama y mi laptop descansaba sobre mi estómago. Miraba la pantalla sin ponerle mucha atención, hoy no era un buen día, desperté enfermo sin ganas de hacer nada, me chocaba estar enfermo es irritante y aburrido; para poner el día peor West se había largado en una cita con Feliciano y me dejo solo en la casa.
-Maldito Ludwig…- lo maldije cerrando de golpe la pantalla de mi laptop. El golpe resonó en la casa vacía, me quede mirando a la nada en mi habitación, estaba furioso por estar enfermo y celoso porque Ludwig se estaba divirtiendo en una cita con ita-chan.- ¡! Joder esto no es justo!!
Arroje la laptop a un lado, me levante de la cama y me dirigí a la cocina, Llene un vaso con agua y me lo bebí de un trago. Eso me refresco, tenía mucho calor tal vez porque estaba enfermo, deje el vaso en el fregador e iba de regreso a mi habitación cuando el timbre sonó.
-¿uh? ¿Quién podrá ser? – me sorprendió que alguien llamase a mi casa, no esperaba a nadie y era muy temprano como para que Ludwig regresara.
– ¡ya voy!… ¡como molestan! … ¡¿Qué quieren?! – grite irritado. Abri la puerta y lo vi, jamas se me cruzo por la mente que fuera él quien había tocado el timbre. – ¡¿y tú qué demonios haces aquí?!

Escuché cómo gritaba desde adentro,momentos después,abrió la puerta y me ...gritó en la cara.

-..Hola,estoy muy bien,gracias por preguntar..-dije de la forma más calmada que pude.Se supone que lo primero que se hace es saludar a la persona,pero suponiendo que es Prusia,no me esperaba un recibimiento más ameno..-Como sea..Respondiendo a tu pregunta,tu hermano me pidió que viniera a visitarte y que te trajera algunas cosas,¿Me vas a dejar pasar?. -Le pregunté.

Lo mire incrédulo. No podía creer que West le hubiese pedido tal cosa sabiendo “lo bien que me llevaba con Austria” -Ese idiota me las pagara- masculle apretando los dientes.
-está bien ¡pasa! –dije haciéndome a un lado.- Perdona el desorden… como si me importara.- cerré la puerta de un golpe después de que el entro.
-ponte cómodo…- le dije mientras me dirigía hacia la cocina. Hacía mucho calor y no podía soportarlo, odiaba estar enfermo. – ¿No quieres algo de tomar?- le pregunte, cuando ya iba a medio camino. Lo mire, observaba detenidamente la casa, que estaba hecha un caos, había platos y vasos regados por todos lados y los restos de una torre de dvd’s que colapso cuando buscaba una película que ni siquiera vi, y pensar que hice todo eso después de que West me dejo solo, quizá Austria ya se había formado una imagen de mi.
-jum…- susurre. Como si me importase lo que el piense de mi.

Entré en su casa y comencé a observar todo a mi alrededor.Hacía mucho que no entraba ahí,y ciertamente lo recordaba como un lugar un poco más..ordenado.Habían platos y vasos por todas partes,Cajas de DvD's esparcidas por doquier,sencillamente esa casa era un caos.

Avancé hasta una pila de platos y los tomé,dispuesto a llevarlos yo mismo a la cocina.

-Un té estaría bien..-Le dije,respondiendo a su ofrecimiento.-Pero antes hay que limpiar un poco aquí,alguien enfermo no puede estar en un ambiente tan desordenado,eso es malo..-Le expliqué,levantando algunas cosas más y caminaba hacia la dirección de Prusia- La cocina es por aquí, ¿Verdad?

Me arrepentí de haberle preguntado ¿té? No tenía ganas para nada ni siquiera para hacer té y mucho menos de limpiar.

-si es por aquí… pero no es necesario que recojas este desorden yo lo recogeré más tarde- le respondí y le quite los platos que llevaba cargando.- ven vamos ah preparar tu té… ahorita yo me encargo de recoger este desorden.- dije al ver que no cedería en sus intentos de limpiar. Me lleve a Austria a la cocina para alejarlo de mi sala, ojala y distrayéndolo con algo más se le olvidase lo de limpiar, pero conociendo a Austria no creo que sea posible… esta iba a ser una tarde muy larga.

“West ¿por qué me mandaste a Austria? ¡¿Por qué?!”.

-pero...- Me quitó las cosas de las manos y me guió hasta la cocina.Le seguí sin chistar,sabia que ese ''luego'' realmente significaba ''nunca'',obviamente no limpiaría,mucho menos estando enfermo.

Entré en la cocina y dejé las bolsas que traía con los encargos de Alemania en la mesa.La abrí y comencé a sacar las cosas.

-Bueno,Alemania dijo que debías tomar estas cosas a la hora que se te indica..-comencé a decir,mientras le mostraba las botellitas con los jarabes.- Te manda unos jarabes para la tos y algunas cosas para la fiebre,de hecho,deberías ir a tu cuarto y quedarte en tu cama ahora mismo,yo puedo encargarme del té..-Comentaba mientras sacaba todas las cosas de la bolsa,a excepción de una caja,la cual miré por un segundo antes de cerrar dicha bolsa y dejarla en la mesa.

-Por cierto..-Le miré a los ojos y le comenté-..Ludwig dijo que volvería probablemente en la tarde..- Le informé.Si no estaba feliz de verme,el enterarse de que pasaría toda la tarde en su casa no le haría mucha gracia.

- ¡no me trates como si fuese un bebe!- le espete mirándolo a los ojos, no me gustaba que me hablasen así, me ponía furioso. Pase mi mirada a las cajas de medicinas que Roderich había traído, eran muchas cosas que tenía que tomar y si no lo hacía Ludwig se molestaría conmigo.

Suspire vencido, a veces creía que Alemania me sobreprotegía demasiado –esta bien tomare esas cosas pero no me iré a tirar a la cama como un pobre invalido, me quedare a aquí contigo para asegurarme de que no te robes nada.- le dije mientras me servía otro baso de agua.

Estúpido Ludwig dijo que regresaría tarde, de seguro se ha de estar divirtiendo con ita-chan, como me gustaría estar con ellos. Tome el agua de un trago y deje el vaso junto al grifo. –no es justo…- susurre y me acerque a Austria.